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2.17.2012

TRASCENDIENDO EL SALON DE LOS ESPEJOS [2/3]



Por Natasha Acimovic
Sus Artículos en ADN Omni
EL MAPEO  DE LA SIMULTANEIDAD DEL DISCURSO
Y EL TERCER ESPACIO EN EL RELATO DEL EXPERIMENTADOR

Si trasponemos la Simultaneidad del Dircurso de Henderson y el concepto Bhahba del Tercer Espacio en la Narrativa del Experimentador, y a su vez lo usamos como una lente para observar la cuestión, entonces, en las palabras de un experimentador, “los aspectos de lo invisible pueden hacerse visibles”. [19] En mi revisión de los planteamientos de Henderson y Bhabha, he renombrado este registro como el Espacio Triádico.


La construcción del yo humano-extraterrestre y su interacción con los planetarios y (o) de las inteligencias interdimensionales simultáneamente, se relacionan a través de formas externas e internas de enlace para formar lasa visiones del mundo de los experimentadores.
 
Este paradigma no es una construcción fija, sino más bien una fluctuación que revela cómo los puntos de identificación y diferenciales (o de acuerdo y de conflicto) son continuamente negociados y reapropiados a través del contacto con extraterrestres. Al igual que con el modelo de Henderson, las narraciones de los experimentadores demuestran diferencias del extraterrestre dentro de la identidad humana y diferencias humanas dentro de las percepciones de la identidad del extraterrestre. 

Cabe destacar que es a través de este lente para observar la construcción de las identidades humano-extraterrestres que podemos, en parte, mapear la evolución de la conciencia del experimentador por la comprensión de cómo deviene transformado. De hecho, son los puntos de acuerdo y de conflicto los que pueden dar lugar a los momentos de una conciencia fusionada. 

Esta forma híbrida, representativa del Espacio Triádico, no es ni humano ni no humano, tampoco extraterrestre, sino ambos simultáneamente. En ambas modalidades, oral y escrita, podemos identificar los momentos de fusión humano-extraterrestre presentes dentro del discurso. Identificando el espacio híbrido luego puede ser abordado mediante el examen de lo que se expresa en el lenguaje y otras formas visuales. 

El Espacio Triádico puede ser comprendido examinando cuando las polaridades se superponen o se disuelven, y mediante la detección de cómo las diferentes formas puede alterar el lenguaje. Este último punto puede ser abordado de múltiples maneras, pero una manera útil de pensar acerca de este espacio es como "intersticios" o espacios intermedios en los que se rompen las formas lingüísticas conocidas, tales como la telepatía, las formas simbólicas de comunicación, la "heteroglosia", conocida como "hablar en lenguas" y la aparición de lenguas extraterrestres (s). [20]

Por lo tanto, lo que es expresado en el lenguaje cuando ocurren momentos de hibridación de la conciencia, así como las diversas formas con que interrumpen el proceso del lenguaje, es claramente indicativo del  Espacio Triádico. El uso que hago de la denominación “identidad humano-extraterrestre” se despliega como un término “paraguas” y no pretende ser un paradigma reduccionista que oscurezca otras diferencias que existan entre los experimentadores, como el género y la etnia, y de hecho, la inclusión de estos aspectos pueden brindar ideas aún más constructivas.

El trabajo con experimentadores realizado por John Mack será privilegiado en este documento, ya que su obra ha producido profundos y agudos enfoques, y su método ha permitido el surgimiento de "lo menos tangible" a la superficie [21]. Estos relatos se pueden utilizar como un manual para comparar la relación con otros casos de abducción, pero con el fin de proporcionar una visión global de otros enfoques, serán también examinados.





HABITANDO EL ESPACIO DEL YO FRAGMENTADO

En esta sección voy a llamar la atención sobre cómo la conciencia múltiple  se relaciona con el despertar del yo de los experimentadores humano-extraterrestres y cómo éste frecuentemente resulta en un especie de conciencia fragmentada.

Para eso voy a establecer por qué los modelos postcoloniales son relevantes y luego voy a ubicar la noción de Posición y Desplazamiento para demostrar cómo puede ser aplicado al relato del experimentador, destacando lo que es revelado en el proceso, y luego finalizar exponiendo algunas implicaciones para la Exopolítica.

Una faceta del contactado y del experimentador del fenómeno que no es, creo, suficientemente explorado es como la manifestación de la presencia extraterrestre impacta en la construcción de la identidad humana. Un aspecto vital de ello es cómo las declaraciones realizadas por los experimentadores reflejan el estado de habitar una "conciencia dual". 

Mary Rodwell define este término como el reconocimiento por parte de los experimentadores que "una parte o un aspecto de ellos, tiene este tipo extraterrestre, mientras que el otro se siente humano" [22]. Empleando el significado que dicho término nos proporciona, tenemos un valioso punto focal para reconocer cuando los experimentadores articulan explícitamente esta condición y (o) hacen declaraciones que son indicativos de este estado. 

Sin embargo, a la luz del modelo de Henderson, un término más adecuado, tal como la conciencia múltiple, para dar cuenta de las muchas similitudes internas y externas y las diferencias encontradas al tratar con la presencia de extraterrestres, permitiría un conocimiento más en profundidad y multi-capa de la identidad emergente. 

Esto es particularmente relevante si consideramos que algunos experimentadores participan con más de una raza extraterrestre, por lo que es totalmente factible que las diferentes especies tendrían un impacto sobre la identidad humana de diversas maneras. Por lo tanto, adoptando este lente multi-capa para ver como esa identidad permite una comprensión más profunda de la surgente naturaleza ET.

Otra razón fundamental para la identificación de la manifestación de la conciencia múltiple en el enfoque de varios experimentadores a menudo revela un sentido de una identidad fragmentada como resultado de la negociación entre los yoes humano-extraterre. Esto es crucial porque este estado, entre muchos otros, demostrativos de las experiencias de encuentro con extraterrestres, se asemeja mucho a las exploradas por los teóricos del Post-colonialismo. 

Aunque la definición y el uso del Post-colonialismo como marco crítico es todavía objeto de debate hasta hoy en día, su principal preocupación es la de examinar los efectos y el legado cultural de la colonización desde el primer contacto hasta la era post-independencia. De hecho, la amplitud del Post-colonialismo como disciplina aborda áreas tan diversas como la migración, la esclavitud, contratos de trabajo, idioma, raza y género, algunas de las cuales no son fundamentalmente Post-coloniaes pero se utilizan para armar este análisis [23]. 

Como resultado de ello, los aspectos de los modelos Post-coloniales son relevantes para la narración del experimentador porque ambos exhiben el impacto de la dinámica psicosocial cuando dos o más culturas se entrecruzan en diferentes vías y es en este sentido que las similitudes y los paralelismos pueden ser detectados. 

A pesar de que este tema se encuentra fuera del alcance de la discusión de este Ensayo, su uso particular es importante en el marco de la Exopolítica en cuanto a ampliar la comprensión del fenómeno vivido por el experimentador con cuestiones como la ambivalencia, las zonas fronterizas, la bilocación, la doble conciencia y el exilio. 

El uso particular en este caso es cómo el modelo de Bilocación tiene relevancia para el experimentador de una identidad fragmentada. Por lo tanto, voy a definir este modelo y mostrar cómo éste se relaciona con el relato del experimentador.

El modelo de Bilocación pone de relieve cómo la "crisis de identidad" entra en juego a través de los intentos de desarrollar o recuperar una "identificación efectiva en la relación entre el yo y el lugar" [24]. Inherente a este concepto es la sensación de que una Bilocación ha ocurrido. 

Si adaptamos esta premisa para aplicarlas a las anotaciones de los experimentadores, entonces sus relatos a menudo incluyen la inserción de ambientes desconocidos que alteran el sentido terrestre de la ubicación, y, posteriormente, el sentido del yo. 

Además, el parámetro terrestre del sentido temporal es a menudo roto de alguna manera y la función del tiempo que falta, a menudo de relieve en el relato de los abducidos, representa sólo un aspecto en el espectro de la temporalidad. La identidad fragmentada, atribuible al atravesamiento de los yoes humano y extraterrestre, está complicada desde el momento en que el establecimiento de una relación entre el yo y el lugar es problemático. 

Esto se debe a que no hay lugar extraterrestre familiar que pueda ser totalmente identificado en relación al aspecto ET o su identidad. De hecho, el lugar con frecuencia uniforma el tapiz multifacético de la identidad, pero donde es el hogar de los experimentadores que se encuentran atrapados en el "Espacio de la Enunciación", entre la tierra y los reinos extraterrestres. 

La localización regional del extraterrestre es desconocida en gran medida y la dislocación del conocimiento de la Tierra se ve agravada por el el consenso omnipresente en la sociedad humana de que el fenómeno experimentado no tiene fundamento. 

El desplazamiento resultante, por lo tanto, contribuye al sentido de la identidad fragmentada, produce así una "alienación de la visión" y una "crisis de la propia imagen". La pregunta es, entonces, pueden los experimentadores recuperar un sentido de conexión entre el lugar y la ubicación, y si es así cómo se logra esto? En la siguiente sección destacaré algunos ejemplos de cuando los relatos  de los experimentadores demuestran esta ruptura en la identidad.

El relato de Pedro Fausto es un ejemplo de cómo el sentido del yo se fragmenta cuando se trata de negociar su experiencia de vida "en dos mundos paralelos". La crisis de identidad resulta del descubrimiento de que en él existe una parte “alienígena". Esto lleva a la "pérdida" de la "identidad" y, posteriormente, una preocupación acerca de ser removido de su "familia terrícola" [25]. Esto pone de manifiesto cómo los resultados de la identidad fragmentada, en parte, surgen a partir de una dislocación entre el yo y el lugar. 

La declaración de Joe también se parece mucho a la de Pedro, cuando describe el sentido de "lealtad dividida entre el extraterrestre y los reinos de la Tierra. Como resultado, él siente que está "traicionando a sus socios de la Tierra", y afirma: "No sé a donde pertenezco". Este sentido de conflicto, síntoma de una orpolaridad, lleva a Joe a declarar que siente se siente dividido por llevar una "vida secreta" [26]. 

Por otra parte, Pablo identifica su casa con estar en un barco. Mientras se discute el impacto de los yoes humano-extraterrestre sobre la identidad de los mismos experimentadores. Pablo observa astutamente que, "Es difícil para nosotros estar así fragmentados". Esta lucha es representativa de ser atrapados "en el medio", o en el "entre-espacio”. [27]

Del mismo modo, cuando Scott descubre su identidad ET expresa el deseo de ser "uno de ellos", y al mismo tiempo, deseando ser humano. Un punto de conflicto surge cuando señala que "no puedo ser ambos". Cuando se le pregunta por qué él responde: "Entonces jamás estoy en casa, de cualquier manera". [28] Una vez más, la ruptura entre el yo y el lugar, resulta en una identidad fragmentada.

¿Cuáles son entonces las implicaciones de la Exopolítica? Ciertamente, hay algunas diferencias obvias entre el post-colonialismo y la esfera del experimentador, pero mientras las ramificaciones de la primera pueden ser más eficazmente establecidas, la segunda presenta una paradoja ya que se trata del impacto de un paradigma extraterrestre y nada familiar. Por otra parte, esto se complica debido al rechazo a la hipótesis extraterrestre como una parte de la realidad consensuada. Una preocupación similar es explorada por los profesores Alexander Wendt y Duvall Raymond. 

Ambos examinaron el tema OVNI como un "tabú autoritario" que es producido activamente a través del mecanismo de gobierno soberano. Esta necesidad política propagada por la unión de la ciencia y el Estado, aun cuando este pacto forma un algo un tanto incómodo, garantiza la estabilidad de la misma. Sostienen que, dado que el asunto OVNI incluye la posibilidad de los extraterrestres como una hipótesis plausible, entonces la soberanía moderna se enfrenta a una "amenaza física y ontológica" a ser controlada.

Yo sugeriría que si esto es cierto para el tema OVNI, entonces esto lo es aún más en lo que respecta a las cuestiones inter-dimensionales y (o) de inteligencias extraplanetarias interactuando con los ciudadanos humanos de la Tierra. En consecuencia, el asunto OVNI representa una especie de trampa doble ya que para revelar la primera daría lugar a un cuestionamiento de este último, y es este sitio en particular que plantea "las amenazas ontológicas a la identidad o al ser social". [29]

Posteriormente, si la dinámica psicosocial de las experiencias permite similitudes con los identificados por los teóricos postcoloniales, entonces es un imperativo político para la Exopolítica explorar más a fondo por una serie de razones importantes. En primer lugar, a un lado del marco psicológico utilizado por John Mack y otros para dar cuenta de la validez del fenómeno de las abducciones y contactados, tenemos un marco psicosocial comparativo que da más peso a la cuestión al mostrar que el impacto de la presencia extraterrestre construye estados de ser que son representativos de cómo múltiples culturas humanas se cruzan. 

En segundo lugar, es éticamente imperativo para la Exopolítica hacerlo. Cuando se deja a los escépticos y a las autoridades científicas examinar una de estas zonas, y en este punto en particular me refiero a cómo Wendt y Duvall situan a los escépticos y a la ciencia como fuente de autoridad, entonces aparece el tipo de análisis que es representativo de El tratamiento del Dr. Marcos Newbrook, como una especie de bromista interplanetario o disidentes dirigidos a confundir la aplicación de las modalidades lingüístico científico autoritarias a través de su uso de los idiomas extraterrestres. [30]

Huelga decir que si la Exopolítica como disciplina no se aventura más en el territorio de la academia para reapropiarse de los sitios que son fundamentales para una comprensión más profunda de la ETH entonces aquellos que hablan con autoridad soberana serán capaces de mantener la "epistemología de la [OVNI] la ignorancia". [31] En el proceso, el Estado moderno es capaz de sostener este discurso públio que, usando las palabras de Mark Newbrook, "el balance de probabilidades" en relación con la ETH “no merecen una atención focalizada". [32]

En tercer lugar, el imperativo ético es que se trata de que ellos mismos son experimentadores que se quedan para hacer frente a las consecuencias psicológicas de la maquinaría de la soberanía, y para qué es la Exopolítica, si no un sitio de resistencia y un discurso contracultural?



[Continuará...]


 Trascendiendo el Salón de los Espejos [3/3]

Diseño|Arte|Diagramación: Pachakamakin
Portada: Pachakamakin



CITAS:

[19] John Mack, Passport to the Cosmos: Human Transfromation and Alien Encounters (London, USA: Thorsons), 160.  
[20] Henderson, 22-23.
[21] Mary Rodwell, Awakening: How Extraterrestrial Contact Can Transform Your Life (UK: New Mind Publishers), 276.
[22] Mary Rodwell, Awakening, 228. 
[23] Bill Ashcroft, Gareth Griffiths, and Helen Tiffin, eds., The Post Colonial Studies Reader (USA, Canada: Routledge, 1995), 2.
[24] Bill Ashcroft, Gareth Griffiths, and Helen Tiffin, eds., The Empire Writes Back: Theory and Practice in Post-Colonial Literatures (USA, Canada: Routledge, 2002, 8-9.     
[25] Mack, Abduction, 320-328.
[26] Mack, Abduction, 181-184.
[27] Mack, Abduction, 225-229.
[28] Mack, Abduction, 102-103.

1.30.2012

CONQUISTANDO LA EXPERIENCIA



VALLE DE LILMACHI, CHILE
PARCELA DE NOOSFERA
[Primera Semana]

"Conquista Estando En La Experiencia" esto es lo que vibro en mis pensamientos en estos primeros días aquí en el Valle de Lilmachi. Podría decirse que nada sencillo por las costumbres que arrastramos aunque posible por el lugar en donde hoy estoy ...

Después de haber pasado por un periodo en el cual pude vivir sin horarios de entrada y salida, de haber palpado la libertad de elegir en qué momento hacer las cosas. Después de ver lo que me permito hasta ahora de mí misma ver. Observo la resaca que se trae de años de rutina de acción desmedida con sentido ajeno. Puedo ver como un sistema creado para someter entra en nuestras vidas con el ímpetu del "esto es todo". Y se instala con la sutileza de quien sabe lo que hace en quien, aun, no sabe qué hacer de sí.

Esto podría ser simple de ver, aunque quizás difícil de manejar. Imagino que cuando uno nace, trae consigo el entusiasmo de vivir y explorar, experimentando cada sensación que se presenta como si fuera la única . Viajo por esa línea a ese momento, y puedo ver como cada actitud, cada palabra permisiva o no, se instala sin preguntar. Y seguramente el entorno principal de mi niñez, mis padres, pensaron que hacían lo correcto, y sin darse cuenta trasladaron ideas de cómo vivir. Y así, cada experiencia deja de serlo durante el tiempo que uno pensaba que eso era su propia vida. Se ve tremendo y gracioso al mismo tiempo.

Recuerdo el momento en que la realidad impropia se desvanece por primera vez. Uno comienza a ver ideas estrellándose contra el piso, una tras otra, hasta bajar el primer telón. Es imparable y al mismo tiempo es una gracia que la vida nos otorga cuando esto sucede. Darse cuenta de que hasta ese momento uno se la pasó en el asiento trasero del vehículo, y el conductor lleva el nombre de esas ideas que someten la libertad. Lleva las cadenas del no saber quién uno es, sabiéndolo. Y al mismo tiempo, lleva la llave que abre el candado de la limitación. Lo posible de quien sabe que la obra de la vida es propia y se estrena día a día en el teatro de la libertad. Lleva los rostros de todo cuanto nos dijeron, cubriendo lo que no nos dijeron nunca, quien uno es. Y esta adivinanza deja de serlo cuando uno se atreve a manejar su propia vida. Y el azar desaparece con la caída del primer telón.

Sin embargo, el haber estado expuesta a estas ideas durante tanto tiempo, creó hábitos que intentan inmiscuirse sutilmente una y otra vez. Y desde donde hoy me sitúo habiendo transcurrido casi un año de mi elección de independencia individua, por así decirlo. Puedo ver rondando los pensamientos de la obligación de hacer por hacer, para ser.

Aquí donde hoy estoy compartiendo mi vida, en esta parcela, voy caminando la libertad y al mismo tiempo observo en mí la costumbre de la falta de ella. No obstante esto, ella se expresa en cada espacio dándome la posibilidad de soltar cada eslabón de la cadena de viejas ideas, y sin pedir permiso respiro el aire de poder elegir, y más aun, respiro la posibilidad de darme cuenta de qué me pertenece realmente y qué no.

Solo llevo una semana en esta estación, como diría un amigo que vive en ella, y lo intenso de la experiencia, esta llevándome a la profunda avenida de creencias. En donde el semáforo del observador se enciende en el momento oportuno, y dice, detente, respira, observa y elige. Parece algo simple, sin embargo, en el convivir con la familia que aquí vive, es cuando descubro mis limitaciones. Es cuando encuentro que necesito soltar. Y por ventaja humana, el cuerpo sabe como acompañar este momento.

Estos últimos días pude ver como los pensamientos que no coinciden con la realidad que hoy vivo salen expulsados por mi cuerpo de la manera posible que el encuentra. Incluso, cada noche al irme a descansar a la habitación, lo percibí. Al cerrar los ojos, veo una trama profunda que no me pertenece, sin embargo está; el miedo a la incertidumbre que genera el no formar parte de la rutina establecida por un sistema de ideas confusas llamadas realidad única. Y al despertar, luego de haber permanecido ahí contenida por el lugar, descubro que eso forma parte del lastre de lo que ya fue. Que mas allá de permanecer esa vivencia en el pasado, por darle un lugar en esta historia, aun intenta picotear el plato del presente. Sin embargo, esta experiencia que hoy vivo, adonde hoy estoy, hace posible que uno esté atento a ver como estas larvas añejas saltan como mosca en la leche en este valle. Algo así, como el aliado perfecto para la evolución, si uno lo elige.

Hoy es sábado, y aquí se está por compartir un Temazcal de los Ocho Soles, y sé, más allá de que nadie dice qué hace, que el lugar y quienes aquí viven fueron acompañándome a este momento durante esta semana. Pero esto, no es una tarea designada, sino más bien, es la realidad que aquí se vive. Entrar en este espacio, es comprometerse con él y con uno, es entregarse con respeto a la vida cotidiana que aquí se lleva. Sabiendo que nada de lo que sucede, es porque sí. Que cada palabra tiene un sentido renovador en sí misma, un sentido responsable con propósito de evolución.

Aquí, se sabe para que se pronuncian las palabras, y quienes las pronuncian no siguen una doctrina, sino más bien, siguen su experiencia y la comparten en cada momento del día.

Llegó ahora el momento de reencontrarme, con lo que tiempo atrás integró un cambio de conciencia para mi vida. Ese momento, que finalizó con un Temazcal, hoy se recrea con un inicio en un Temazcal. Lo que continúa, no está escrito en palabras aun, ya que para esto la experiencia necesita la vivencia. Y esta es mi elección y, más aun, es lo que alimenta la motivación de poder compartir lo que realmente vivo.

Ahora me inclino frente a la puerta del útero de esta tierra, El Temazcal, La nave del tiempo de la creación!



12.22.2011

EL UNIVERSO COMO HOLOGRAMA MULTIDIMENSIONAL [1/2]


Por Raúl Corral Quintero [*]


Durante siglos, los físicos han trabajado con la ilusión de que el universo es una máquina gigantesca que podemos comprender desarmándola y ensamblándola cada vez que se quiera. Pero aunque el universo esté infinitamente interconectado, existen ciertos fenómenos (por ejemplo, los sistemas subatómicos) para los cuales ciertos enfoques y modelos teóricos han perdido validez. Debido a esto, David Böhm [1] concluye que las correlaciones entre las partículas subatómicas indican que estamos cerca de un nuevo y revolucionario concepto de "orden". Un concepto según el cual el universo ya no debe ser entendido como una máquina ni mediante la relación lineal causa-efecto,sino como un holograma multidimensional [2].


Un holograma es una fotografía tridimensional confeccionada con ayuda de un rayo láser. Para producir un holograma, los científicos primero proyectan un haz láser hacia un objeto y a continuación hacen rebotar un segundo haz láser en el reflejo de la luz del primero. Lo que se registra en un trozo de película para crear un holograma es el patrón de interferencia creado por los dos haces láser. A simple vista, la imagen registrada en ese trozo de película es un torbellino carente de significado; pero si a través de la película revelada se proyecta otro haz de láser, la imagen reaparece en toda su plenitud original y tridimensional. Además de ser tridimensional, la imagen registrada en un holograma difiere de una fotografía convencional en un sentido muy importante.

Si se corta una fotografía normal por la mitad, cada parte contendrá sólo la mitad de la imagen contenida en la fotografía original. Esto se debe a que cada diminuta sección de la fotografía, tal como cada punto de una pantalla de televisión en color, contiene nada más que un sólo bit (fragmento) de información de la imagen entera. En cambio,si se corta un holograma por la mitad y se proyecta un haz de láser a través de una las secciones, se comprobará que cada mitad contiene la imagen completa del holograma original. Cada diminuta parte del holograma contiene no sólo su propio bit de información, sino también todo otro «bit» de información correspondiente al resto de la imagen; en consecuencia, se puede cortar un holograma en pedazos y cada porción individual contendrá una versión borrosa pero completa de la imagen entera. Dicho de otro modo, en un holograma cada parte de la imagen interpenetra todas las demás partes, de la misma forma que en el universo no local pensado por Böhm todas sus partes se interpenetran.

Si Böhm está en lo cierto en sus conjeturas y el universo es un gigantesco holograma multidimensional, semejante orden holográfico subyacente no puede menos que tener profundas consecuencias para muchas de las nociones de la realidad basadas en el sentido común, por ejemplo, en un universo holográfico el tiempo y el espacio ya no serían considerados fundamentales debido a que el universo sería entendido como poseedor de un nivel más profundo, donde conceptos como el de "localización" pierden su consistencia; el tiempo y el espacio tridimensional, como las imágenes del pez en los receptores de televisión, tendrían que ser vistos como proyecciones de este nivel más profundo.

Dicho de otro modo, en el super-holograma del universo el pasado, el presente y el futuro se pliegan estrechamente entre sí y existen en forma simultánea. Esto sugiere que incluso sería posible, alguna vez, rescatar del olvido el pasado más distante a partir de la noción del universo como un súper-holograma [3].

En la década de 1960, mientras Böhm miraba un programa científico televisado, él descubrió otra metáfora que permite visualizar un orden plegado. En dicho programa, el relator presentó un interesante fenómeno en que intervenían una gota de tinta y un jarro de diseño especial que contenía un cilindro rotativo y un estrecho espacio relleno de glicerina. Primero, el narrador depositó una gota de tinta en el cilindro. A continuación, hacía girar una manivela por cuyo efecto el cilindro rotaba y la tinta quedaba plegada a la glicerina hasta desaparecer. Empero, cuando se hacía girar la manija en sentido contrario, la gota original de tinta reaparecía como si se desplegara de la glicerina y recobraba su forma inicial. Este hecho ofreció a Böhm una metáfora para explicar con exactitud el tipo de proceso que conceptualizaba [4].

En términos de tiempo, el universo tal como lo percibimos, con su sucesión de momentos aparentemente separados, sería la gota de tinta una vez que la manija la haya estirado hasta untarla bajo forma de una larga cinta. No somos capaces de percibir que el tiempo en el nivel del super-holograma posee una estructura coherente y continua, debido a que esa estructura está plegada o implicada en el nivel del universo que conocemos "secretamente". El tiempo y el espacio tridimensional no son, a juicio de Böhm los únicos procesos que se entienden mejor si se los ve como plegados y desplegados al interior y al exterior del "orden implicado".
EL ORDEN IMPLICADO Y SU CONEXIÓN CON LA MENTE HUMANA 

Tal vez el aspecto más enigmático de la teoría de Böhm es la forma en que puede aplicarse a nuestra comprensión de la mente humana. Según él ve la cuestión, si cada partícula de la materia se interconecta con todas las demás, el cerebro mismo puede ser visto como infinitamente interconectado con el resto del universo. Böhm cree que semejantes interconexiones, ante cuya concepción misma la mente vacila, podrían incluso proyectar luz sobre el La respuesta de la ciencia es que no existe ninguna distinción última entre mente y cuerpo. Conciencia es sinónimo de cerebro y aun cuando el cerebro muere, todas aquellas cosas que asociamos a la conciencia (la percepción de nosotros mismos y de otras cosas, los actos del entendimiento, etc.) mueren con él. El punto de vista opuesto sostiene que somos más que la suma de nuestras partes y que cuando morimos algún aspecto de nuestra conciencia sobrevive. 

Si aceptamos esta perspectiva, ahora la pregunta sería la siguiente: ¿qué es ese "algo" que sobrevive? Un gran pensador que articuló con inusitada claridad en qué podría consistir ese "algo" fue el filósofo y matemático René Descartes. Descartes describió la materia como "sustancia extensa". Evidentemente por "sustancia extensa" Descartes entendió la materia como algo que está hecho de distintas formas y existe en el espacio. En contraste con esto, dijo que la conciencia es "sustancia pensante" y al establecer una distinción tan nítida entre ambas, consideró claramente que las distintas formas que se presentan en el pensamiento no tienen extensiones o separaciones en el espacio tal como lo conocemos. 

Böhm se muestra particularmente interesado en esa distinción y señala que las diferencias que Descartes establece entre conciencia y materia son precisamente las mismas que él señala entre el orden implicado y el orden explicado; sin embargo, Böhm observa: "Es difícil decir mucho acerca de facultades tan sutiles como éstas" [5]. No obstante, Böhm cree que mediante las reflexiones y el examen cuidadoso de lo que sucede en algunas experiencias es posible obtener nuevas y valiosas claves acerca de la probable conexión entre la conciencia y el orden implicado. 

Böhm sugiere, por ejemplo, que consideremos el proceso que se opera cuando se escucha una bella composición musical. En algún momento dado, es posible que sea ejecutada una sola nota, pero de alguna manera la mente conecta cada nota en el seno de una sensación de totalidad. 

Según Böhm, uno no experimenta la realidad de la pieza entera aferrándose al pasado o comparando alguna nota determinada con el propio recuerdo de las anteriores. 

Más bien cada nota causa una "transformación activa" de lo que hubo antes. Dice Böhm: "Uno puede así obtener una sensación directa de la forma en que una secuencia de notas se pliegan en muchos niveles de conciencia y de cómo en cualquier momento dado las transformaciones que fluyen de tantas notas plegadas se penetran y se mezclan entre sí para dar origen a un sentimiento inmediato y primario de movimiento" [6]. Böhm sugiere además que ésta es una manera en que cada uno de nosotros adquiere experiencia de primera mano acerca de la naturaleza holográfica e implicada de la conciencia. Esta no es la única prueba disponible que sugiere la posibilidad de que la conciencia sea holográfica. 

Trabajando simultáneamente y sin tener contacto directo con David Böhm durante los años de 1970 a 1980, el neurofisiólogo Karl Pribram de la Universidad de Stanford propuso también un modelo holográfico de conciencia. En apoyo a sus conclusiones, Pribram menciona pruebas de que la memoria no aparece localizada en ningún área particular o célula individual del cerebro, sino que parece distribuirse de tal manera que coincide con la totalidad del cerebro. Uno de los avances fundamentales de la neurofisiología ha consistido en el descubrimiento de relaciones directas entre ciertas áreas cerebrales y funciones corporales específicas. Se han descubierto así centros del habla, de la visión, etc.; sin embargo, ya en la década de los años veinte, el neurofisiólogo Karl Lashley había establecido que el daño cerebral parcial no impedía a una persona ejecutar funciones controladas por las partes faltantes. Cuando una de las áreas localizadas era destruida, se alteraban las funciones de los órganos sensoriales regulados por ella; sin embargo, Lashley descubrió que el funcionamiento de nivel superior, como en el caso del recuerdo de acontecimientos específicos, no era perturbado. Hoy neurofisiólogos como Pribram interpretan ese fenómeno como prueba de que las estructuras responsables de memorizar y recordar no están localizadas en ninguna parte específica del cerebro, sino que se distribuyen por cualquier zona del mismo en forma muy parecida a como la imagen de un holograma está comprendida en todas las partes de éste [7].






CITAS:
[*] Raúl Corral Quintero. 
Profesor-investigador de tiempo completo de la UAM-Iztapalapa.


[1] David Böhm Físico teórico y ayudante de Albert Einstein. Profesor de la
Universidad de Princeton. Publicó una explicación acerca de los mundos que a su juicio existen más allá del «cuanto» y sus asombrosas sugerencias sobre lo que pueden ser esos mundos. Böhm entabló una gran amistad con Jiddu Krishnamurti en 1961 y esa relación
parece haber tenido un importante efecto sobre el pensamiento de aquél, pues lo ayudó a desarrollar más aún sus ideas sobre las variables ocultas. De esta nueva evolución resultó en 1981 la publicación de su libro Wholeness and the Implicate Order, que contiene ideas más recientes sobre lo que las correlaciones entre las partículas subatómicas sugieren acerca del universo.
[2]  Böhm, David, Wholeness and the implicate order, p. 145-47.
[3] Gliedman, John. Mind and Matter, en Science Digest, Marzo de
1983, pág. 70.
[4]  Böhm, op. cit., p. 13
[5] Ibid., p. 198. 
[6] Ibid., p. 199.
[7] Véase Pribram, Karl, Languages of the Brain, comp. G. Globus y
otros, Nueva York, Plenum, 1971; Karl Pribram, Consciousness and
the Brain, Nueva York, Plenum, 1976.



 BOHM, David. Wholeness and the implicate order, Londres, Routledge and Kagan Paul.
 BOHM, David y WEBWE, Renée: The Physicist and the Mystic - Is a Disloque Between Them Possible?, en Ken Wilbur, The holographic and Other Paradoxes, Boston, Massachusetts, New Science Library, 1982.
 GLIEDMAN, John. Mind and Matter, en Science Digest, Marzo de 1983.
 PRIBRAM, Karl. Languages of the Brain, comp. G. Globus y otros, Nueva York, Plenum, 1971.