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5.09.2013

LOS PODERES DEL CHAMAN [5/7]

Por Francisco Trujillo







EL ABISMO INTERNO

Luego de haber ingerido una buena cantidad de Hongos Alucinógenos, me quedé solo en aquella habitación la cual tenía una Puerta abierta hacia el Vacío. Tal vez hubiera deseado acompañar a mis amigos en su Expedición, pero no lo hice; tal vez hubiera podido tener miedo luego de la absolutamente inesperada visita de aquel Búho maravilloso, pero no lo tuve. Entre mis manos mantenía el Talismán que me había dado Antonio, y con eso fue suficiente.

No sé cuánto tiempo permanecí acostado. Recuerdo que pude observar cómo el torrente de polvo iluminado por la luz se movió del lugar en que comencé a mirarlo, conforme avanzó la mañana y luego la tarde. En mi mente no ocurría nada claro, primero los pensamientos se habían agolpado unos sobre otros, como las habitaciones de aquella construcción, luego se mezclaron como un Mazo de Cartas y finalmente se disolvieron para dejar lugar a algo muy parecido a la nada.

Atravesé por un Estado inusual de ¿Cómo llamarlo? ¿Inconsciencia Lúcida?: mi Mente no entendía las cosas por medio de Conceptos, es más, no las entendía de ninguna manera sino más bien las asimilaba; no tenía idea de lo que podía ser el Bien o el Mal y tampoco era capaz de encontrar relaciones lógicas entre las diversas Manifestaciones del Mundo que se escenificaban ante mí. Tal vez un Estado semejante haya experimentado durante los Primeros Días de mi Mida, cuando era apenas un Recién Nacido.

De pronto me puse de pie, sin más esfuerzo de mi parte que desearlo. Soy hasta ese día incapaz de encontrar un límite claro entre lo que de estas Memorias sucedió en realidad y lo que imaginé que sucedió; solamente puedo decir que lo viví todo. Dí algunos pasos con el Amuleto entre mis manos, sentí que era él quien me guiaba. me sujeté bien del quicio de la Puerta y eché una ojeada al Vacío.

No pude ver nada claro, solo plastas densas de Color que se mezclaban con Armonía entre sí: una color Verde, con multitud de Tonos, en la parte inferior reptando y cambiando a cada momento; el Cielo profundamente Azul, ya no Amarillo como antes, y en medio el Blanco de las Nubes, girando y girando sobre sí mismo, como el torno de un molino. La Vivencia del Color en aquel Estado es algo Especial: los Colores no se ven solamente, sino que "acarician la mirada"; muestran sus Facetas más Nobles, por así decirlo, de algo Sublime, algo que Se Vive, Se Goza, Se Funde de una manera Mágica con la propia Personalidad. Sin embargo, sentí el Espectáculo que me ofrecía la vista de la Sierra como algo ajeno, como la Ventana de un Universo al cual yo no pertenecía, así que cerré la Puerta.

Eso es: mis Actos no estaban Guiados por Razonamiento alguno, como ya lo dije, sino más bien por lo que simple y llanamente sentía; me había convertido en un ser de pulsiones, como una Ameba...

O como un Angel -imaginé esto último en ese momento y me puse a reír a carcajadas.

Caminé hasta las Escaleras y comencé a Subir; levanté la Puerta y llegué a la siguiente Habitación; todo en ella era muy parecido a aquella en la que habíamos pasado la noche, excepto que no tenía Puerta Vertical. No había ninguna parte por la cual la Luz penetrara, estaba muy Oscuro, por lo tanto, bajé a mi Habitación por la lámpara. Cuando encendí el fósforo para Prenderla, el rugido de la Flama me hizo saltar el corazón de terror. Volteé a un lado para volver a tomar el Talismán, pero ya no se encontraba, tuve miedo, un miedo idiota, animal. salí corriendo hacia ninguna parte con tal de escapar de no sé qué.

Volví a Subir las Escalera, tan rápida y atropelladamente que me sentí más bien Bajando; no Trepando sino Cayendo por ellas, rodando, desbarrancándome. Por un momento el Techo de la Habitación me pareció que era el Piso y viceversa. Sé que narrado esto no suena muy impresionante, pero experimentado en carne propia sí lo es; es como si uno mismo se encontrara totalmente solo, Fuera de Lugar.

Rodé efectivamente por las Escaleras hasta quedar tirado a un lado de la lámpara. La Luz que entraba por la Ventana ya se había debilitado. Volteé a un lado y vi la pequeña Cabeza de Animal que me había dado Antonio; me apresuré a tomarla y de inmediato el Alivio a mi Angustia comenzó a inundarme. En realidad, Ella me Protegía.

Seguí las indicaciones ¡Del Talisman! -o si se quiere, el impulso que tuve en cuanto la tomé entre mis manos-, y me incorporé con lentitud para agarrar la lámpara, ponerme de pie y volver a emprender el Camino de Ascenso. Esta vez la Luz de la lámpara causaba un efecto Protector sobre mí, ella era el Centro de una especie de Esfera Luminosa que me daba Fuerza y Vigor.

Subí hasta la siguiente Habitación, no sé con qué Propósito, pero de una manera muy decidida. Sin reparar en nada de lo que en ella había, Continué mi Ascenso; Subí por la siguiente Escalera, abrí la Puerta y llegué hasta el otro cuarto. Ahí encontré una Escalera más y volví a Ascenderla. No sé cuantas veces realicé la misma Operación, pero recuerdo que fueron muchas. Subí y Subí por las Escaleras Idénticas y siempre llegué a Habitaciones iguales. La Esfera de Luz me Protegía.

Me sentí dentro de una Cadena de Cuartos Idénticos, condenado a pasara por ellos infinitamente y nunca encontrar el Ultimo, hasta que por fin el Amuleto me hizo detener; no fue propiamente que me hablara, sino que algo de su Forma de Estar entre mis Manos me hizo sentir un tonto. Hice alto en cuanto llegué a una Nueva Habitación. Ahí miré por las paredes en busca de una Puerta que me condujera a Otro Lugar, ya no hacia Arriba.

Pronto la Encontré; ahora sé que por Aquella Puerta nos introdujo nuestra Anfitriona la noche anterior. Caminé hacia Ella y la Crucé. No me encontraba mareado ni nada por el estilo, era simplemente que todo pasaba, fluía de una manera casi líquida; cada Acontecimiento se ligaba con el siguiente ¿Cómo decirlo?, sin terminar de ser el mismo: no había acabado de Subir cuando ya estaba Caminando; no había salido de la Habitación cuando ya me encontraba en Otra Parte.  

Cuando abandoné aquel Cuarto llegué a una especie de Jardín muy rústico y poco cuidado, lleno de vegetación, de cuya Existencia no me había dado cuanta la noche anterior. Aunque, de cualquier manera, con todo y que entonces hubiera reparado en él, de seguro este Nuevo Encuentro me hubiera resultado por completo distinto.

Ya era la tarde avanzada; la Luz del Sol era Dorada. Pude ver y sentir las muchas Plantas que poblaban aquel Lugar como Seres realmente Vivos; su Vida para mí entonces no resultó un mero Concepto, como el que queda luego de haber estudiado rudimentos de Biología. No. Las Plantas Respiraban, exudaban su finísimo vapor y tenían... ¿Sentimientos?, ¿Pasiones? Cada una de ellas Atravesaba un drama particular: había Plantas Viejas Sabias, Plantas exóticas, Plantas perversas y agresivas que se enroscaban en otras y poco a poco las iban matando; había Plantas humildes y Plantas soberbias, Plantas brutas y Plantas nobles.

¡Y qué decir de los insectos!, cuya Presencia pude sentir más vivamente que nunca; era la Vida misma la cual había estallado en millones de Chispas Aleteantes y Febriles. El mismo descarnado Drama reinante entre las Plantas se Manifestaba en Ellos a un ritmo mucho mayor. En una Ráfaga vino a mí sentir el Dolor de un ratoncito en el pico de un Búho, e intuí algo tal vez muy simple, pero que entonces se mostró con toda su Profundidad: la Vida y la Muerte son una misa Cosa; no existe una diferencia esencial entre ambas, como no la existe entre la Noche y el Día ni entre la quietud absoluta y el movimiento, los cuales se muestran como opuestos irreconciliables.

Fui Parte Integral de todo Aquello; sentí su Bondad y su Maldad, su Belleza Plena. Tal vez resulte incómoda mi insistencia en este Punto, pero algo muy distinto es narrar ahora esta Experiencia que Vivirla. Ser ella. Se presentó de una manera Diáfana en mí la Unidad del Universo Completo: lo mismo que ocurría entre las Plantas, los Animales y los Insectos ocurría dentro de mí, al igual que en la Integridad del Cosmos. Todo es Una Sola e Indivisible Maravilla; nada la sobrepasa y nada escapa a Ella.

Anduve así un buen tiempo, perdido entre Plantas e Insectos, Maravillado de estar Vivo. No sentía tener una parte exterior, no tenía Cuerpo ni nada Material; era Pura Conciencia, Espíritu Puro, Libre inclusive de Pensamientos y cualquier otro Artificio Mental.

Pero había algo que ensombrecía mi Fervor; una especie de Voz Muda me advertía constantemente acerca de la Presencia del Mal, de que detrás de cualquier hoja o debajo de cualquier tronco podía encontrarse un ser ponzoñoso capaz de dañarme.

Caminé sin Rumbo Fijo; recuerdo haber pasado frente a la Cocina, la cual era una especie de jacal con un Gran Fogón en medio, donde la Mujer que nos había recibido la noche anterior trajinaba con la ayuda de dos muchachas, riendo y parloteando como un grupo de pájaros. Era la hora del Crepúsculo, cuando las Aves regresan bulliciosamente a sus Nidos, lo cual, creo, me hizo relacionar a las Mujeres con ellas. Cuando me vieron de pronto guardaron silencio, pero al instante comenzaron a reír, supongo que a causa de que Adivinaron mi Estado. Me parecieron, las Tres, Hermosas y Brillantes, pero no me tomé la molestia siquiera de saludarlas y Continué mi Camino.

A esta Altura del Relato encuentro un Nudo en mi Memoria. No sé cómo, pero la Figura del Mal, la cual yo había venido presintiendo, de pronto surgió de entre la maleza.

Una Serpiente apareció de repente a mi lado, no demasiado cerca. Pegué un brinco y la lámpara se me cayó. La Serpiente se me quedó mirando a los ojos, mientras fue sacando poco a poco todo su Cuerpo de su Escondite; tenía la Piel Dorada, con Diseños Rojos y Negros, Azules y Verdes.

Cuando hubo salido por completo, comenzó a enredarse sobre Sí Misma, una y otra vez, formando Ondas Hipnotizantes sin quitarme nunca la mirada de encima. Sacaba de vez en vez la Lengua y la hacía Vibrar rápidamente, con un siseo despreciable. Su tamaño no me resulta fácil de calcular, tal vez haya medido dos metros de largo, tal vez cuatro, el caso es que era muy grande; tenía el grosor de una pierna humana.

Era un espectáculo horrible, pero con una buena dosis de Atracción. La fealdad es cautivante, posee un Poder Seductor distinto al de la Belleza, pero la Atracción que sobre nosotros ejerce en ciertas ocasiones puede llegar a ser mayor. La Serpiente, después de realizar aquella Danza Circular, me sonrió, como una mujer coqueta, me dijo "ven", sin utilizar Idioma alguno, y se introdujo en una Habitación luego de atravesar con rapidez una buena parte del Jardín.

Entré tras ella al Cuarto de los Arboles, el cual lucía igual que la noche anterior. Casi de inmediato mis ojos se acostumbraron a la Luz de las Velas. Olía a Incienso. Al principio no pude verla entre los troncos, por más que busqué; sentía mi vista como una especie de Cámara de Televisión, la cual sólo podía ver de frente, y que para dirigirla hacia un lado u otro, tenía que mover toda la cabeza.

Penetré entre los troncos, esta vez sin niguna imagen de sus espectrales Habitantes en mi Mente. No dejaba de escuchar el siseo de la Serpiente dentro del tumulto generalizado de las Aves de todo tipo regresando a sus Nidos; de seguro el Sol ya se había ocultado y ahora estarían peleando unas contra otras por asegurarse un buen lugar para pasar la noche en la Copa de algún Arbol.

La sentí Reptar por el piso de tierra, muy cerca de mis pies, pero no pude verla, hasta que por fin apareció Enroscada con Altivez en una de las varillas más gruesas, al fondo de la Habitación. Como pude, y con muchísimo cuidado ne acerqué. Ella siseaba y sacaba la Lengua; se repegaba al tronco como hacen los Gatos cuando piden caricias.

Me le quedé mirando a la Cara, a esa horrible y enigmática Cara con ojos de pupilas verticales. Aunque sabía que se trataba de un ser peligroso, tenía la certeza de que no podía hacerme daño alguno. Fui bajando la vista a lo largo de su Cuerpo  para poder contemplarla entera; cuando llegué  al lugar donde debería encontrarse la cola di con... con otra Cabeza! Idéntica a la primera.

Tuve el primer impulso de huir, di media vuelta en busca de la Salida pero me detuvo una Voz cálida y acariciadora, la cual, como las anteriores, no propiamente "escuché" sino que Sentí. La Voz pronunció varias veces mi Nombre y pidió que no me fuera; no puedo ahora dejar de pensar en Juan Diego y la Virgen. Cuando volteé de nuevo hacia ella, la Serpiente había trepado con su otra Cabeza a un tronco cercano, formando una muy extraña Figura, como de dos monstruosos Hermanos Siameses.
-¿Qué quieres? -me Preguntó una de las Cabezas, de la misma silenciosa manera. Yo permanecí callado.
-¿Qué has venido a buscar -me dijo la otra- ¿Quieres dinero? Tengo mucho.
Esto último me pareció totalmente fuera de lugar, lo cual me hizo reír.
-No -le dijo la Primera Cabeza a la Segunda-, él no ha venido por dinero, él ha venido por cosas más grandes.
No dejaban de sisear afirmativamente y sin quitarme un momento la vista de encima. Yo pude sentir entre mis manos, como si se tratara de un ser vivo, la Cabeza de Animal que me había dejado Antonio.
-Ha venido -continuó la Cabeza- para hacerse Grande y Fuerte.
-¡Si, todavía se orina en la cama! -rió desagradablemente la Segunda-.Hay que abrazarlo para que no se cague en los calzones.
Yo me incomodé. Quise de nuevo salir corriendo.
-Espérate, espérate; no lo trates  así. Vino desde muy lejos para conocernos... ¿Qué quieres? -volvió a dirigirse a mí. Yo no podía articular palabra, o tal vez no quería hacerlo.
-Quieres ser Grande ¿No? -insistió la Segunda-. Quieres ser un Santo? -preguntó la Primera Cabeza-... Ya lo decía, si es buena gente.
-Ahí va a estar , en la Iglesia, cargando una Cruz y todos se van a santiguar a sus pies; le van a pedir Milagros, lo van a hacer llorar ¡Es buena gente!
-¿Para qué quieres ser Famoso? -preguntó la Segunda Cabeza, ahora dirigiéndose a mí-. ¿Para qué quieres ser un Héroe? ¿De qué te sirve, si finalmente vas a morir?
-El Recuerdo que dejes en la gente no es nada -continuó la Primera-. Las personas no te conocen ni quieren conocerte. Si llegan a saber de ti en el Futuro se harán una idea a su gusto y te encerrarán  debajo de ella. Lo que realmente fuiste y lo que realmente eres se perderá para siempre en el olvido. ¿Quieres Fama? Eso no sirve para nada.
-Tienes que morirte -sentenció la Otra Cabeza, con Dulzura casi maternal-. Tienes que Dominarte a Ti Mismo, esa es la verdadera Lucha, y no otra. Dominarte aquí y ahora. tienes que Cambiar, tienes que hacerte uno con el Cambio.
-Las cosas Cambian - continuó la Otra-, el Universo lo hace continuamente. cambia, Cambia con él. Tú no existes. nada existe, sólo el Cambio. Todo se va, todo Muere. Tú también; tu estás muriendo. Date cuenta de tu Muerte. Desátate del mundo. Esa es la Muerte, esa es la Verdadera Vida, la Vida del Hombre Fuerte. Ven, deja que te muerda. vas a morir y luego Renaces Más Fuerte... ¡Vas a ser un Chamán!
Me horroricé. Tan repugnante, tan grotesca me pareció aquella Oferta que no pude contener un Grito, mientras la Serpiente aún no había terminado de hablar. Grité, grité y salí corriendo de ahí. Salí dando tumbos, se me cayó el Talisman y comencé a llorar!... Afuera las mujeres me asistieron, cuando se dieron cuenta de lo que pasaba.






Diseño|Arte|Diagramación: Pachakamakin

4.17.2013

LOS PODERES DEL CHAMAN [4/7]

Por Francisco Trujillo






LAS FUNCIONES DEL CHAMAN

En el ejemplo del Capítulo anterior, especie de modelo promedio de la intervención de un Chamán en la vida cotidiana de una Comunidad Tradicional, podemos observar las Principales Funciones que todo Chamán ha cumplido a lo largo de la Historia.

Ake Hultkrantz, especialista en el Tema, describe al Chamán como ejecutor de Cinco Principales Funciones:

 Curandero.
 Psicopompo o Conductor del Alma de los Muertos.
 Animal-Mago.
 Profeta.
 Sacerdote de Sacrificios.

Curandero. El Chamán tiene la capacidad de curar, pues conoce y mantiene contacto con las Fuerzas que para la mentalidad mágica tradicional provocan los estados patológicos, a saber, los Entes Espirituales. Esta mentalidad supone que cuando un hombre cae enfermo se debe  a que su Espíritu "se ha extraviado" o ha sido capturado por alguna Potencia Espiritual; de tal manera que lo procedente es, Primero, averiguar el Origen concreto de la enfermedad, luego las razones responsables de dicho caso, para posteriormente encontrar los Medios, de Carácter Mágico al igual que la enfermedad, para restaurar la Salud. Comúnmente, los Chamanes añaden a esta Capacidad de naturaleza espiritual un Conocimiento bastante preciso de la Herbolaria y de la Medicina Natural.

Como Psicopompo, o Conductor de las Almas de los Muertos, el Chamán no tiene, a diferencia del punto anterior, competencia dentro de la Comunidad, pues él es el único Hombre que Conoce en Detalle los Caminos que llevan al Más Allá, y que cuenta, inclusive, con la Fuerza necesaria para, en dado caso, rechazar los posibles ataques de Potencias Espirituales interesadas en apoderarse del Alma del recién muerto o en impedir su entrada en el Otro Mundo.

Un punto señalado por los diversos Autores que han estudiado las Religiones Arcaicas, es el interés que el hombre, en aquellas lejanas Epocas mostraba hacia la necesidad de que el Alma de sus Muertos no regresaran a este Mundo.

Más adelante, por otro lado, veremos con mayor detenimiento, el papel del Chamán como Animal-Mago, aunque en el caso de nuestro ejemplo ha sido evidente una personalidad no humana del Chamán, cuando en el Otro Mundo se metamorfoseó en un Animal Mágico. Mucho del Poder del chamán  se basa en esta doble personalidad, que hermana su Ser propiamente Humano con una Fuerza Animal, irracional, trascendente, mágica y misteriosa.

Como Profeta y Sacerdote de Sacrificios, en el caso referido, el Chamán supo, sin que ningún hombre se lo comunicara, la existencia de dos enfermos en una determinada choza de tal Aldea; asimismo, también lo hizo cuando advirtió a la Nueva Pareja de Esposos que si no realizaba ciertos Ritos Específicos, las adversidades se lanzarían sobre ellos. En ambos casos, el Chamán usó su Capacidad para enterarse de lo que sucede en un lugar donde él no se encuentra él de manera física.

Por otra parte, como Sacerdote de Sacrificios, la Función es la de Señalar los Ritos que han de cumplirse; es él quien conoce con precisión el tipo de Sacrificios necesarios para Determinados Fines y para cada uno de los Espíritus que pueden influir en las Operaciones Realizadas.

Además de lo Anotado, el Chamán cuenta con otras Capacidades, tales como la Bilocación, arriba señalada; puede Escuchar Voces Sagradas, cambiar la Forma y el Peso de su Cuerpo para hacerse tan ligero como un Insecto o tan pesado como una Montaña, puede Tornarse Invisible y también Volar.

Las distintas Funciones del Chamán se encuentran más vinculadas con Aspectos Culturales. El es quien, por sus Propias Funciones y por la Característica de sus Poderes, concentra la Memoria Colectiva  de su Gente;  no solamente los Conocimientos Prácticos y los Rituales de tipo oficial, digamos, como los que realiza  todo Sacerdote, sino también aquellos Especiales y Trascendentes, más vinculados con una Visión Mística  de la Cosmología de su Pueblo. El no sabe solamente cómo fue que Se Creó el Mundo y cuales son las más importantes Potencias Espirituales, sino que conoce  a dichas Potencias, Angeles, Dioses y Demonios, a la vez que ha presenciado, con los Ojos de su Poderoso Espíritu, desenvolverse ante él mismo, ante sus diversas Personalidades, los Misterios de la Creación. No solamente Ha Aprendido "en Teoría" de su Instructor tales Misterios, sino que los Encarna, los Vive y los Reproduce con cada uno de Sus Actos.



EL EQUIPO DEL CHAMAN

Los Poderes Mágicos del Chamán, como hemos visto, dependen de una muy personal característica de aquel Individuo "llamado" o escogido, así como también de su Preparación; pero además, dichos Poderes se encuentran estrechamente vinculados con la Indumentaria que Porta.

Las diferentes Partes del Vestido del Chamán guardan un Profundo Significado; nada de lo que él Viste se encuentra ahí por Azar, y comúnmente cumple Una de Dos Funciones, si no es Ambas: o participa en el Incremento de la Fuerza Espiritual de su Portador, o se encuentra ahí como una Señal para los Espíritus, positiva o negativa, de Bienvenida o de rechazo.

Es por todo esto que el Atuendo forma parte importantísima  del "Equipo" Mágico del Chamán, así como el Traje de un Astronauta o el de un Buzo. Después de todo, es muy parecida la Función de los Tres Trajes, pues cada uno de ellos resulta necesario para realizar la "Inmersión" o el "Viaje" por un ambiente hostil; en el caso del Astronauta se trata del Espacio Exterior, el Buzo baja al Ambiente Submarino, mientras que en el caso del Chamán, se trata del Más Allá, de donde las Almas comunes y corrientes no pueden regresar, por lo menos sin sufrir Grandísimos Cambios.

Al igual que muchos de los Elementos que entran en Juego en el Chamanismo, los Factores Mágicos y la participación directa de las Potencias Espirituales en la Vida del Elegido se hacen manifiestas, en lo que respecta al "Equipo", por la Vía de los Sueños y de los Acontecimientos Fuera de Lo Común. No de cualquier manera es que el Chamán Se Apropia de sus Objetos de Poder, como también se les llama, pues Cada Uno de Ellos participa íntimamente en su Unicidad Personal, pasa a formar parte de su Fuerza Mágica y la Fortalecen. El Nuevo Chamán tiene que "salir a la búsqueda" de sus Objetos de Poder, o esperar que de alguna manera Ellos Se Le Manifiesten en la Vida, para lo cual debe permanecer atento a la mínima Señal y actuar en el momento preciso. En Ocasiones estos Objetos Le Salen al Paso, inclusive ciertas Extrañas Voces proporcionan la Clave para dar con Ellos, a veces Ellos Mismos Se Arrojan a su futuro Poseedor.

Los Principales Componentes de este Equipo son:

 Traje.
 Manto.
 Máscara.
 Pectoral.
 Tocado.
 Calzado.
 Tambor.
 Palillo.

El Traje es la Base  de la Indumentaria del Chamán; sobre él descansarán Elementos Más y Más Específicos. Existen grandes variaciones entre las diversas Regiones y Pueblos en torno a este punto, e inclusive entre los de la misma Región y Pueblo. Existen Chamanes, como los de la Tribu noadit, que realizan sus Prácticas desnudos, mientras otros cargan un Traje que entre Adornos y Objetos de Poder que de él penden, llega a pesar más de veinte kilogramos. Con todo, el caso de los noadit no es muy común.

La Confección del Traje del Chamán se encuentra vinculada con la Naturaleza Específica de su Poder, así como con la Fuente del mismo. Los Espíritus Aliados, o Protectores, determinan la clase de Elementos que Pasarán a Formar Parte del Traje; si estos Espíritus Familiares, como también Se Les Llama, se Manifiestan en Forma de Animales, por ejemplo: un Oso, un Lobo o un Bisonte, entonces la piel de dicho Animal constituirá la Base del Traje, así como los huesos del mismo formarán parte importante del Atuendo, y en tal sentido el Traje servirá para identificar al Chamán con sus Aliados, así como para facilitar su Participación en los Poderes del Mismo.

Sobre dicha Base, y también con Grandes Variaciones entre un Chamán y otro, Serán Colocados los Objetos e Imágenes que Simbolicen e Invoquen los diversos Poderes de la Naturaleza, entre los que se encuentran las Serpientes y Reptiles, las Aves y hasta huesos y cabellos humanos; se pueden encontrar Símbolos de los Poderes Planetarios del Sol y de la Luna: del Mar y de la los Vientos, de tal manera que el Traje llega inclusive a constituirse en una especie de summa del Universo, o de la Parte del Universo con la cual el Chamán  se encuentra particularmente vinculado. El Traje, de esta manera, resulta ser una especie de Microcosmos que reproduce el Orden Universal y que facilita las idas y venidas del Chamán entre Uno y Otro Polo de la Existencia.

Dado que el Chamán porta este Traje durante sus más importantes Ceremonias, éste llega a ser considerado una Morada de los Espíritus y Centro de Concentración del Poder Personal de su Portador, a tal Grado que, cuando Este muere, la Prenda llega a considerarse como un Objeto Sagrado y, en ciertas ocasiones, es llevada hasta un lugar solitario y lejano de la Comunidad, con el fin de que los Espíritus la abandonen cuando lo deseen, sin que ello cause algún problema.

El Manto es una Extensión del Traje Base, Fabricado también con la Piel del familiar o Animal de Poder, del cual ostenta colgados algunos Objetos Especialmente Poderosos, así como, pintados, Diseños Evocadores de las Fuerzas Naturales que son Manifestaciones de los Poderes Espirituales.  

La Máscara es un Elemento de la Mayor Importancia, aun cuando existe una buena cantidad de Chamanes que Realizan sus Operaciones sin ella. la Máscara cumple Funciones similares a las del Traje, pero colocada sobre el rostro, aumenta en buena medida su Significado: la Máscara funciona como Clave para que el Chamán sea "reconocido" por los Espíritus amigos y enemigos; para que en el Primer Caso, estos Sean Atraídos, mientras que, en el Segundo, Se Alejen. Cumple también la importantísima Función de Permitir la Optima "Personificación" de los Espíritus en el Chamán, es decir que él por medio de la Máscara, facilita que las Fuerzas Espirituales con las que se encuentra vinculado "lo posean", digamos, lo utilicen como Medio de Expresión de una manera fuerte y clara.

La Máscara puede ser fabricada casi de cualquier material natural, como pueden ser las Pieles, la Madera, las Piedras, los Metales e inclusive Calaveras de Animales y hasta Humanas, pero también pueden llegar a simplificarse tanto como una capa de Pigmento o de Aceite sobre el rostro.

El Pectoral es una Pieza fabricada comúnmente de Metal que puede adoptar ciertas Formas y Tamaños pero generalmente el Chamán lo porta, como su nombre lo indica, sobre el pecho; tiene una superficie pulida, por lo que posee, las Virtudes del Brillo y la Reflexión. Contiene varios Significados y Funciones, dependiendo -como muchas de las cosas que pertenecen a este Mundo Mágico- de la Personalidad e Indole del Portador: puede simbolizar el "Brillo Interior" del Chamán así como su capacidad de "ver" el Alma de los demás humanos; al igual que ellos mismos pueden "verse", es decir pueden Reflejarse  en su Superficie. por otra parte, sirve también como Objeto de Adivinación y como Repelente contra los Demonios, pues se cree que cuando estos ven reflejados sus rostros en la Superficie del Pectoral, salen huyendo asustados.

El Tocado, que en ocasiones se convierte en un Sombrero, varía también mucho en cuanto a Formas y Tamaños; normalmente se confecciona con Plumas o Cabezas Disecadas del Animal Familiar, también conocido como Nagual del Chamán. La Función es la misma que la del Traje, la Máscara y el Pectoral, solamente que de una manera específica sobre la Cabeza del Chamán, su parte más apreciada. Cuando se compone de Plumas, tiene la Función Especial de brindarle Seguridad y Potencia en los "Viajes".

El Calzado es un Elemento de importancia relativamente menor.
"En aquellas regiones -escribe Ward Rutheford- en las cuales se hace necesario un Calzado Especial, éste puede representar la Pata de un Ciervo, la Garra de un Ave o la Zarpa de un Oso." 
Su Función es la de permitir y facilitar, también, que el Chamán sea capaz de desplazarse Caminando en el Mundo de los Espíritus.

Con el Tambor entramos en un Terreno de particular importancia dentro del "Equipo" del Chamán. El Tambor no se lleva puesto, ni se encuentra fabricado con la Piel o los Huesos del Animal Familiar o Nagual, sino que participa de una Simbología más abstracta y generalizada a nivel mundial.

En Primer Lugar, debemos decir que el Tambor, fabricado comúnmente con un marco de Madera, más bien ovalado, y que tensa un solo Parche de Cuero, es una especie de "contenedor" de Espíritus, por medio de cuyo Uso el Chamán es capaz no solamente de Provocar Su Propio Extasis, sino también de Evocar y de Mantener la Presencia de sus Espíritus Protectores mientras realiza sus Operaciones.

Con ayuda del Tambor, el Chamán realiza su Viaje como si fuera un Caballo o una Canoa; en ciertas Ocasiones El se considera a Sí Mismo como una Flecha Lanzada Hacia Las Alturas, en cuyo caso el Sonido del Tambor hace las veces de Arco.

Con el Tiempo y las Distancias, el Tambor ha Cambiado mucho de Forma, no así de Función; en América Central y del Sur se ha convertido en ciertos casos en una Matraca; en Asia Central ha adquirido la Forma de un Instrumento de Cuerda, rudimentariamente parecido a un Banjo.

Se supone que el Aro del Tambor, siempre de Madera, se fabrica, en la mayoría de los casos, con la del Arbol del Mundo, o Arbol Cósmico, Centro Arquetípico del Universo y Canal Vivo de Unión entre el Altísimo Cielo, el Mundo Humano y el Submundo. Por dicho Arbol el Chamán Asciende y Desciende entre los Planos de la Existencia.

El Arbol es una Visión frecuente en el Extasis Chamánico y Pieza Central de su Cosmología. Es por medio de Sus Sueños, y otras Manifestaciones Mágicas, como el Chamán que aún no tiene Tambor recibe las Señales para destacar sus Poderes. También tiene Gran Importancia y se encuentra Fabricado comúnmente con Hueso, Madera o la Cornamenta de un Animal Poderoso.

Armado con este Instrumento tan fuera de lo común, tan lleno de Poder Mágico, el Chamán se encontrará en las mejores posibilidades de tener Exito en sus Empresas.

Es clara la peligrosidad que representa el ejercicio de su Vocación, pues al internarse en el Mundo de los Espíritus se pone al Alcance de Potencias muy por encima de las Humanas, y con el fin de salir airoso en el enfrentamiento con ellas es que busca Aumentar su Poder Personal por medio o con el auxilio de estos Elementos. La sola Fuerza Espiritual, que es muchísima en un Chamán maduro, resulta poca en este sentido, y en la mayoría de las veces es necesaria la participación de Elementos Externos como los aquí mencionados.



LAS PLANTAS SAGRADAS

 La Ayahuasca
 El Cactus de San Pedro
 Los Hongos alucinógenos (que son diversos)
 El Ololiuhqui
 El Tabaco
 El Peyote

Estas Plantas son conocidas como "Sagradas", porque el Efecto Alucinógeno de sus Componentes sobre la Conciencia Humana es interpretado por la Visión del Mundo del Chamanismo como Manifestación de un Poder que viene directamente del Mundo de los Espíritus. Que quede bien claro: existen otras plantas como la Marihuana {cannabis indica}, la Mandrágora, la Belladona, la Datura, consideradas también como Sagradas, pero trataremos las enlistadas. Para mayor Información en este punto, recomiendo al Lector la obra de Michael Harner: Alucinógenos y chamanismos.

Ayahuasca. {banispsterosis caapi} Es conocida entre los jíbaros del Amazonas como ayahuasca, palabra que traducida al Castellano significa algo así como "vino del alma". También recibe el nombre de yaje y caapi. 

El Poder Alucinógeno de esta Planta se encuentra en los Alcaloides llamados Harmolina y Harmina, conocidos también como "telefatina" por su supuesta capacidad para provocar Estados Alterados de Conciencia que permiten Fenómenos relacionados con la PES (Percepción Extrasensorial).

La ayahuasca es la más importante y difundida de las Plantas Sagradas de América del Sur, usada además por otros Grupos Etnicos, los jíbaros, los indios canibo y los cashinahua, sirve como base para preparar una Brebaje muy Poderoso.

El Cactus de San Pedro. Conocido simplemente como San Pedro {Trichocerus pachenoi}, en el Perú y como achuma en Bolivia, se trata de una cactácea de muy antiguo uso en América del Sur. Su Agente Psicoactivo es la mezcalina.

De esta Planta todavía se prepara un Brebaje con la misma Técnica que los conquistadores españoles atestiguaron en sus primeros contactos con las Etnias sudamericanas: se corta el Cactus en rebanadas más o menos gruesas que se dejan remojando en Agua Pura durante Siete u Ocho horas, para luego desechar las rebanadas y Beber el Agua. Es muy Eficaz y Potente para Provocar los también llamados "Estados de Conciencia Alterada".

Hongos alucinógenos. Existen varios Tipos y son usados principalmente por los Chamanes de los diferentes Pueblos de México, país que los dio a conocer al Mundo Occidental contemporáneo, aun cuando se sabe que en la Antiguedad también se consumían ciertos Hongos de este tipo en diversas Regiones de Europa y de Asia.

Ololiuqui. Es una Planta {rivea corymbosa} cuyas Semillas ya utilizaban los Antiguos Mexicas para preparar un Brebaje Alucinógeno, o Provocador, si se prefiere, de "Estados Sagrados" o, "Alterados de Conciencia". El Agente Psicoactivo es nada menos que el Acido Lisérgico, ditilamida, mejor conocido como LSD. De ese Antiguo Uso dan fe los diversos Cronistas de las Conquistas de México. Actualmente es usada de manera principal por los zapotecos.

Peyote. Como el de San Pedro, también el Peyote {lophophora wiliamsii} es un Cactus cuya fundamental Sustancia Psicoactiva es la mezcalina, aunque contiene más de 30 Agentes de ese tipo.

Es usado en el Norte de México, en especial por los huicholes, los coras y los tarahumaras. En Estados Unidos es usado por los indios kiowa y los comanches.

Tabaco. Aunque parezca sorprendente, un tóxico tan "doméstico" y común como el Tabaco {nicoteana tabacum} posee Capacidades Alucinógenas, que son son usadas especialmente por ciertos Pueblos de América del Sur, como los campa, del Este de Perú, quienes lo combinan con la ayahuasca; o como los marao de Venezuela, que lo utilizan solo y alcanzan un Grado de Extasis tan Profundo y Sagrado como podrían lograrlo con cualquier otro Alucinógeno.

Como ejemplo de los Efectos Alucinógenos de estas Plantas, citemos aquí un Relato de Gerard Reichel-Dolmatof, quien detalla la Experiencia Extática del pueblo tukano, en Colombia, producido por la ingestión del Brebaje Sagrado de la ayahuasca:
Según los tukanos, luego de penetrar en un Recinto de Colores y Formas difusas dentro de una indefinida Luminosidad, la Visión gradualmente va cobrando Forma y Claridad ante sus ojos, al tiempo que va enriqueciéndose con Significativos Detalles. Aparece ante ellos la Cinta Celeste conocida por nosotros como Vía láctea, y a la distancia la "fertilizante luminosidad del Sol".
La Primera Mujer Emerge de las Aguas de un inmenso Río y da origen a la Primera Pareja de Ancestros y el Majestuoso Señor de los Animales de la Jungla y de las Aguas, ante cuya presencia vieron nacer espontáneamente las Maravilosas Formas de los Animales, así como la Vegetación: ¡El Origen mismo de la Vida! El Origen del Mal también Se Les Manifiesta: Jaguares y Serpientes, las Fieras responsasbles de las Enfermedades, y los Espíritus de la Jungla, que con sus mentiras y artimañas pierden a los Hombres cuando van solos de Cacería.
La Música de los Tiempos Arcaicos puede Escucharse y los Ancestros son vistos mientras Danzan alrededor de la Creación. El Origen de los Ornamentos usados en las Ceremonias, las Coronas de Plumas y otros Tocados, los Collares y los Pectorales, los Brazaletes y los Instrumentos Musicales, todos se encuentran presentes... Por medio de estas Visiones, Nuevas "Puertas" Son Abiertas A Través de las Cuales es posible avizorar otras Dimensiones que son siempre Más y Más Profundas...
Para estos indios la Experiencia Alucinógena escencialemente sexual, aunque lo importante es "sublimarla", pasar de lo erótico, de lo sensual, hasta una Unión Mística con el Cosmos, con el Mundo Mítico, hasta Ingresar al Nivel del Estado Intrauterino, que es el Grado Ultimo, el Mayor y Más Alto, Alcanzado por Muy Pocos pero Deseado por Todos. Encontramos la Más Clara Expresión de ello en las palabras de un indio educado por misioneros:
"Tomar yaje -declara- es un Coito Espiritual, es la Comunión Espiritual de la que hablan los Sacerdotes". 




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2.27.2013

LOS PODERES DEL CHAMAN [3/7]

Por Francisco Trujillo







EL CHAMANISMO: 
DEFINICIONES FUNDAMENTALES

En la decimoquinta edición de la Encyclopaedia Britannica, refiriéndose a la palabra "Chamán", el profesor Vilmos Dioszagui escribe que su origen es tungúsico-manchuriano {samán}, derivada de la palabra sa, que es un verbo:
"Esto implica una relación con la raíz indoeuropea de la que derivan la francesa savoir y la española saber. De tal modo que el chamán, o samán, es "el que sabe", "dando a la palabra una relación etimológica con términos tan familiares como brujo {witch} y mago {wizardambos de la raíz indoeuropea que significa ver o saber, y que presente en las formas de la palabra francesa voir y de la castellana ver, ambas derivadas de la latina videre, así como también de la alemana wissen, es decir, saber.
El Chamanismo, como modelo de práctica religiosa arcaica, es un fenómeno por excelencia siberiano y central-asiático, pues fue en tales regiones donde los primeros investigadores , etnólogos y antropólogos, se encontraron con él y definieron sus rasgos característicos, aunque  debe quedar bien claro que una cosa es el modelo científico creado por estos investigadores  para explicar el Chamanismo y otra son las prácticas chamanísticas en sí, no realizadas únicamente en aquellas regiones asiáticas sino a lo largo, como veremos, de los Cinco Continentes.

¿Qué es lo que "sabe" el Chamán? ¿Cuál es la naturaleza de ese Conocimiento que lo enviste de tan enigmáticas ínfulas? Lo que sabe el Chamán, lo que él conoce por encima de todos los demás hombres comunes y corrientes es, precisamente, la respuesta a la serie de interrogantes que aquejan a la criatura humana desde que habita esta tierra.

El Chamán conoce las Fuerzas Escondidas que rigen la Naturaleza; él sabe todo acerca del Espíritu Humano y de sus íntimas relaciones con todas las otras Formas de Vida. Conoce de primera mano las Formas Divinas de la Existencia, él es capaz , gracias a que posee dichos Conocimientos, de realizar  casi todo tipo de Hazañas, todo aquello que a los demás hombres  les está vedado. El puede trasponer las barreras del Tiempo y del Espacio, cambiar su Forma por la de un Animal o por la de otro Ser Humano; restituir la salud de un enfermo o provocar la enfermedad en uno saludable; puede devolver la Vida a un muerto y, asimismo, provocar la Muerte.

El Chamán sabe acerca de esto y de mucho más, pues tiene también Conocimientos Secretos que la mente de cualquier otro hombre no sería capaz de comprender e inclusive de tolerar.

Lo que sabe el Chamán no solamente en sí, resulta maravilloso, sino que también la manera misma como lo ha aprendido, como ha llegado hasta él dicho Conocimiento; resulta sorprendente, pues además de la guía de un Maestro Humano, el verdadero Chamán, según la Tradición, adquiere sus Conocimiento directamente de las Potencias que Rigen el Curso del Universo, lo ha aprendido de lo que podemos llamar el Más Allá, el Mundo de los Espíritus.

Todo saber implica Poder. Cuanto Más Se Avanza en la ruta del primero, mayores son las Capacidades desarrolladas por el Poder Personal. En el caso del Chamán, dado que la Naturaleza de su saber es metafísica, en el sentido de que desborda o rebasa las fronteras de lo meramente físico, es trascendente y mágica; la índole de su Poder también es metafísica, trascendente y mágica y, por lo mismo, todo chamán es capaz de hacer lo que ningún otro hombre puede, ni siquiera los más poderosos o los más fuertes, ni los más inteligentes o inspirados, puesto que su Poder, así como sus Conocimientos, se extienden Más Allá de los límites de lo meramente humano.



LO QUE ES Y LO QUE NO ES UN CHAMAN

La Práctica del Chamanismo a lo largo de la historia se ha dado prácticamente en todo el mundo y en la gran mayoría de los grupos sociales. Siempre la imagen  del Chamán aparece  investida  de la misma aureola de majestad  y misterio, así como con patrones repetitivos que lo distinguen de otros "profesionales" o "especialistas" en el trato  con el Más Allá; es decir con las Fuerzas Trascendentes de la Naturaleza, entre los que  podemos encontrar  a los Magos, los Brujos, los Sacerdotes y los Mediums, de tal manera que debemos establecer las diferencias lo más claramente posible.

En primer lugar, un Chamán no es un Sacerdote, pues el tipo de operaciones que realiza para comunicarse con el Más Allá; no se sujeta a un cuerpo de creencias o a una doctrina más o menos institucionalizada, manteniendo en todos los casos un carácter o ciertos rasgos muy personales; para sus operaciones no cuenta con ninguna Escritura o Libro Sagrado, no sigue la huella de algún Profeta en el sentido estricto del término. Por otro lado, las funciones que cumple dentro de su grupo social son específicas y no pueden ser igualadas en el cuerpo ritual al que el Sacerdote por lo común se encuentra sujeto, como lo serían los Nacimientos, los Matrimonios, las Ceremonias de Iniciación a la vida adulta, etcétera.

Un Sacerdote es el miembro de una elite que se ha apoderado de la administración y el control de la vida espiritual del grupo, pasando de esta manera a formar él mismo, parte de un grupo; mientras el Chamán, por lo común, es un individuo, aunque muy vinculado con las creencias de su grupo social, solitario y normalmente reacio al convivio. No tiene que formar parte de ninguna elite para que su Trabajo Mágico sea tomado como legítimo, sino que posee, como ya fue señalado, una especie de "línea directa" con el mundo de los Espíritus; y sus Funciones, así, más bien cuentan con una empatía natural con la comunidad, pues representa y encarna su Cosmovisión (forma de ver el mundo) Tradicional. Por otro lado, las funciones sociales realizadas frecuentemente se encuentran más bien relacionadas con la muerte y con la enfermedad, ya sea para alejarlas o para atraerlas.
El Chamán no es un Brujo, pues ni la Naturaleza ni el origen del Conocimiento sobre el que uno y el otro basan sus Poderes es el mismo.
El Mago o Brujo manipula las fuerzas de la Naturaleza por medio de ciertos Entes Espirituales: posee ciertos Conocimientos de los cuales se derivan determinados procedimientos mediante los cuales es capaz de forzar tanto a los "Angeles" como a los "demonios", así como a las almas de los muertos, para hacer lo que él les ordena. Por su parte, el Chamán no posee fórmulas; con su propio Poder, casi podría decirse que "con sus propias manos", doblega a los seres espirituales y establece diversos vínculos personales con ellos. Un Brujo realiza un Hechizo o un Conjuro; el Chamán hace un Viaje al Más Allá, Asciende a los Mundos Superiores o desciende  a los Infiernos. El Brujo, por medio de la manipulación de Objetos Mágicos, influye sobre el curso de los hechos; para lograr efectos similares, el Chamán trata directamente con las Potencias Primarias del Universo.

El Chamán tampoco es un Medium, como los que existen en los diversos cultos africanos y afroantillanos... El Medium es aquel individuo que "presta" su cuerpo para que sea poseído por los Espíritus. El Medium, en efecto, sirve como "medio" de enlace entre nuestro mundo y el "Más Allá", pero lo hace de manera pasiva; mientras la acción del Chamán es siempre activa y lúcida, él no se abandona al capricho de los Espíritus, sino todo lo contrario: fuerza a los Espíritus a escucharlo y, echando mano de sus propios Recursos, va y viene al Otro Mundo, sin depender, como lo hace el Medium, de la sola voluntad de dichas Entidades.

En resumen, el Chamán cuenta con un carácter propio entre las muchas Formas que asumen los diversos manipuladores de Lo Espiritual desde los orígenes paleolíticos. No es Brujo o Mago, no es un Medium  ni un Sacerdote. El Chamán puede dedicarse a la brujería o a las funciones sacerdotales, pero un Sacerdote o un Brujo "a secas" no puede hacerlo.

Entonces, ¿Cuál es este rasgo característico del Chamán, que impide a otros Acceder al Conocimiento que él tiene y por lo tanto a sus muy particulares Poderes? Mircea Eliade, ya es un clásico en el Estudio de las Religiones en general, y en particular del Chamanismo, dice al respecto:
Los Chamanes son seres que se singularizan en el seno de sus respectivas sociedades por determinados rasgos que, en las sociedades de la Europa moderna, representan los signos de una "vocación" o, al meno, de una "crisis religiosa". Los separa del resto de la comunidad la "intensidad" de su propia experiencia religiosa. Esto equivale a decir que sería más racional situar al Chamanismo entre los Místicos que en lo que comúnmente se llama una Religión.
El Chamanismo sigue siendo siempre una técnica extática a la disposición de una determinada minoría... los pueblos que se declaran "chamanistas" conceden una considerable importancia a las experiencias extáticas de sus Chamanes; estas experiencias les conciernen personal e inmediatamente, porque son los Chamanes quienes, valiéndose de sus trances, los curan, acompañan a sus muertos al "reino de las sombras", y sirven de mediadores entre ellos y sus dioses, celestes o infernales, grandes o pequeños... El Chamán es el Gran Especialista del Alma Humana: sólo él la "ve" porque conoce su "forma" y su destino. 


UN MODELO

Repentinamente la enfermedad llegó a la aldea. En su cabaña, desde hace alrededor de cinco días, una joven pareja yace postrada sin poder ponerse en pie; son el jefe de la familia y su hermano menor. La esposa se encuentra en el cuarto mes de su primer embarazo y ha empezado a temer por la vida de su cónyugue, y por lo tanto por los destinos de ella y del niño.

Los cuidados y los tratamientos que, tanto la muchacha como una anciana curandera, han suministrado a los enfermos no han logrado efecto positivo, y por el contrario, parecen haber empeorado la situación. Los afectados se quejan día y noche, no duermen pero tampoco parecen estar despiertos, sino más bien en un estado intermedio en el cual difícilmente puedan mantener una conversación y darse cuenta de lo que sucede. Sudan profusamente y son incapaces de ingerir cualquier alimento. Han vomitado una sustancia negra y de vez en cuando atraviesan crisis, en las cuales gritan e intentan huir, como perseguidos por terribles seres invisibles.

Finalmente, la anciana aconseja a la muchacha solicitar el auxilio del Chamán, por lo cual ésta pide auxilio a algunos de los hombres para que vayan a buscarlo, pues no quiere separarse de sus enfermos. Los hombres parten en direcciones distintas, pues ha llegado la noticia de que se ha visto al Chamán en dos lugares muy distantes entre sí el mismo día por la mañana, lo cual no sorprende a nadie, pues es de todas conocida esta capacidad (Bilocación) del Chamán; los hombres parten en sus botes hacia diferentes islas cercanas.

Luego de dos días, los hombres regresan sin haber podido dar con el Chamán. Los afectados siguen sin presentar signos de alivio, y la joven esposa se encuentra cada vez más y más preocupada. Se organiza un nueva expedición, en la cual participa la mayor parte de los hombres de la comunidad e inclusive la esposa, junto con la anciana curandera, quienes, por su parte, se internan en la selva. Los enfermos quedan bajo el cuidado de una jovencita, nieta de la anciana... nadie tiene éxito en la búsqueda.

Sin embargo, cuando la desesperada joven regresa a su choza, ya el Chamán se encuentra ahí, sentado en un rincón con una extraña postura que a la muchacha le parece muy incómoda; a las preguntas de ella, el responde que se dirigió hasta ahí porque vió pasar las almas de los enfermos, convertidas en cuervos, hacia el Infierno, y decidió entonces ayudarlos. Finalmente pide que se le deje sólo en compañía de los enfermos.

Cuando la esposa ha salido, en compañía de la jovencita, el Chamán sigue sentado en su rincón. Apenas se mueve; sólo se balancea rápidamente hacia delante y hacia atrás, como un niño; tiene la vista perdida y susurra una extraña y repetitiva Canción. Se incorpora para prender una pequeña hoguera  justo en el medio de la choza; nunca deja de cantar. Vuelve a su rincón y permanece ahí hasta que cae la noche, sale la Luna y asciende hasta la mitad del cielo.

Continúa cantando y cantando en un susurro mientras se mece frente a los enfermos, quienes permanecen inmóviles y sudorosos. Repentinamente, el Chamán se pone de pie de un salto; tiene todavía la mirada perdida, toma su tambor y comienza a tocarlo para acompañarse en el canto. Inicia al mismo tiempo una Danza alrededor del pequeño Fuego, al que no deja de alimentar  de cuando en cuando. Gradualmente eleva el volumen del Canto y acelera el Ritmo de la Danza. Los enfermos permanecen inconscientes.

Poco a poco, el rostro del chamán va adquiriendo una mueca no humana, va llegando a un rictus que más parece el de una máscara con un gesto de éxtasis salvaje y alucinado. La Danza llega a adquirir un ritmo muy frenético siempre alrededor del Fuego, y los ojos del Chamán parecen a punto de salirse de las órbitas. El entona siempre Canción, una y otra vez hasta parece que, con el esfuerzo de su garganta, se va desgarrar. En el paroxismo de su acto guarda repentinamente silencio, y con los ojos cerrados retorna torpemente hasta su rincón para volver a sentarse, luego de haber colocado con el mayor cuidado posible -que no es mucho, pues sus movimientos se han vuelto torpes- su Tambor en el suelo. En cuanto vuelve a sentarse deja caer el cuerpo hacia atrás, como presa de un agotamiento mortal.

Es entonces cuando inicia el Viaje: su cuerpo queda arrumbado en aquel rincón de la choza, inmóvil, pero sólo así su Espíritu puede por fin disociarse e ir hasta el Mundo de los Espíritus para realizar su trabajo.

Junto con el Humo que se desprende de la pequeña Hoguera, el Alma del Chamán se volatiliza y se eleva por los aires, solamente que ella no se dispersa, sino que "trepa" por el tronco del Arbol Mágico que aparece frente a él en cuento ha accedido su Estado Espiritual y Mágico. De esta manera, el Chamán, o mejor dicho, su Alma, sube por ese tronco que le ayudará a salvar la barrera de entre los Mundos. Luego de haber iniciado el Ascenso, recuerda que los Cuervos en que se habían transformado los hermanos enfermos volaban en dirección al Infierno y, en consecuencia, mejor decide descender hasta los Mundos Inferiores, hacia las raíces del Arbol.  

Ya en los Mundos Inferiores, o en los Infiernos, el Espíritu del Chamán puede ser testigo de cómo las almas de los hermanos han sido capturada por una Legión de Espíritus Salvajes, cuyos cuerpos son una mezcla de diversos Animales con figura humana.

En la choza, el cuerpo del Chamán se ha vuelto a incorporar; ha hecho la pantomima de trepar por el tronco de un Arbol, después se ha puesto a Danzar de nuevo, sólo que esta vez más moderadamente. Sus ojos permanecen medio cerrados y el gesto sereno.

El Chamán le pregunta a aquellos Espíritus qué hacen con el par de almas del que se han apoderado, pero no lo hace ni con voz ni con lengua humana alguna, sino con una mezcla de rugido, terrible y profundo, de una fiera y el siseo de la Serpiente.

Los Espíritus, chillando como cerdos y graznando, responden que han capturado a aquellos mortales pues profanaron un recinto sagrado para ir a pescar. En la cabaña, el Chamán ha detenido su Danza por un momento, ha elevado su mirada al Cielo y, en un idioma indescifrable ha pronunciado algunas palabras. Luego vuelve  a cerrar los ojos y agacha la cabeza; comienza a mecer de nuevo su cuerpo, ahora de derecha a izquierda y con los miembros laxos, como un borracho. Regresa al Canto. De repente inhala profundamente y da un salto para volver a la Danza y al Canto, ahora sin el acompañamiento del Tambor, pero a todo pulmón y poniendo en ello todas sus energías.

En El Otro Mundo, el Chamán ha solicitado la liberación de las dos almas, pero los Demonios se la han negado, y entonces de nuevo ha comenzado a Cantar y a Bailar pero de una manera muy distinta a como se encuentra haciéndolo frente  a los hermanos enfermos, pues su Canto vuelve  a ser el rugido profundo y potente con el que hace un momento hizo sus preguntas; además, la Danza tiene el Poder Maravilloso de hacer Crecer Su Cuerpo a cada movimiento, aunque no se trata solamente  de un Crecimiento, sino que a la vez que crece va adquiriendo formas distintas: los brazos gradualmente se le van convirtiendo en Potente y Majestuoso Par de Alas, el tronco se le alarga  más y más, como el de un terrible reptil, pero con varios pares de brazos serpenteantes y muy largos, terminados no en manos sino en garras.

El Canto y la Danza continúan en la choza, efectivamente en voz alta, pero de ninguna manera comparable con la Potencia que los mismos tienen en el Mundo de los Espíritus, donde cada rugido provoca que la tierra se cimbre, a tal grado que hace perder el equilibrio a los Espíritus captores.

Para ahora el Espíiritu del Chamán ya se encuentra convertido en un enorme y majestuoso monstruo al cual los Demonios se han dispuesto a atacar; el Monstruo-Chamán ruge y revuelve su gesto con una forma que algo tiene de parecido con la de un Dragón. Los Demonios dejan inmovilizadas las almas de los dos hermanos, envueltas en una Crisálida semitransparente, como gusanos en plena Metamorfosis y se echan a volar, lanzándose en contra de su enemigo.

La batalla se desarrolla en el aire; ambas partes, el Chamán-Dragón y los Demonios-Animales-Humanoides, se trenzan en una mortal batalla de Gran Belleza, en la cual se entrelazan sus Cuerpos entre las Nubes; mientras, en la cabaña, el Chamán ha dejado de cantar y ahora permanece de pie en un solo sitio, realizando hermosas figuras con el cuerpo, que mueve con lentitud, mientras, de cuando en cuando, lanza gritos feroces, con los de un animal furioso.

El Dragón-Chamán se percata de que aun cuando se deshace de aquellos Demonios con relativa facilidad, por cada uno que derriba se le lanzan dos o tres más, mejor decide dejar la lucha y opta por salvar a los jóvenes, arrebatando sus almas del poder infernal.

Describe una caprichosa figura en el Cielo, va rugiendo y lanzando Llamaradas de Color Violeta por el hocico; su cuerpo parece formar un magnífico nudo en las alturas, que engaña a sus rivales, lo cual él aprovecha para lanzarse hacia el lugar donde permanecen inmóviles las Crisálidas. En la cabaña, el cjhamán se ha tirado al suelo y ha dado una vuelta sobre su espalda, para caer sentado sobre las piernas cruzadas, con la espalda muy erguida y los brazos levantados hacia el cielo. El dragón-chamán se apresura a recoger las crisálidas, pero accidentalemente se le resbala una, que de inmediato es recuperada por uno de los demonios.

El Dragón-chamán se mete al hocico la crisálida que se ha logrado mantener, pero no para devorarla, sino para tenerla lo mejor protegida posible; el Demonio que se apoderó de la otra Crisálida se entierra en el suelo y desaparece de la vista; el Chamán comprende que ya nada puede hacer y vuelve rápidamente hasta las Raíces del Arbol para, trepando por ellas, ascender de nuevo al Mundo de los humanos.

En el Camino toma una Decisión: siempre trepando se sigue de largo hasta las Ramas Altas del Arbol dónde, como si se tratara de un Fruto aún no maduro, arranca una pequeña Alma, en compensación por aquella otra que no pudo rescatar, y la lleva consigo hasta la Tierra, donde podrá encarnarse junto con la que ya la joven esposa lleva en el Vientre.

El Chamán, frente a los dos jóvenes enfermos, cae rendido al suelo, mientras su Alma se encuentra en Camino de Regreso. Cuando vuleve en sí ya la mañana del nuevo día se encuentra avanzada, entonces llama a la muchacha. Le explica lo sucedido, le dice que pudo salvar a uno de los dos hermanos, aunque no sabe a cuál, así que ella debe organizar los preparativos para las Ceremonias Fúnebres, aunque no sabe  a cuál, aunque después de todo, le aclara, no debe ponerse tan triste, pues en compensación ahora ya no será madre de una criatura, sino de dos.

Luego de un par de días, en efecto, uno de los hermanos se opone, y al siguiente muere el otro; quien queda es el cuñado, quien al no tener familia hereda a la mujer del difunto.

Toda la Comunidad participa en la Celebración, portando Trajes Ceremoniales que guardan gran parecido con el Atuendo Mágico del Chamán, pero que ni lejanamente tienen los mismos Poderes: portan Pieles, Plumas y Máscaras y llevan Pintado el Cuerpo. En estos Ritos Funerarios también se encuentra presente el Chamán, quien luego de inahalar el Humo de un Preparado de Hierbas que ha puesto a quemar, se sienta al lado del cadáver, en una posición de respeto y permanece sin moverse, con los ojos cerrados, dedicado a acompañar el Alma del muerto a su nueva morada, guiándolo  por el Camino hacia el Mundo de los Espíritus, que tan bien conoce y que tantos y tantos peligros encierra.

Luego de terminadas las Ceremonias, y cuando aún en la Comunidad, dividida en grupos, ejecuta variadas Danzas, los Nuevos Esposos, siguiendo las instrucciones del Chamán, Celebran el Sacrificio de un pequeño Animal con el fin de que ni el Alma del muerto ni la ira de los Demonios regresen hasta ellos para molestarlos.





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